¡Uyuyyuyuy!

¡Uyuyyuyuy!
Ulcerante ubio ubicuo
¡Uyuyyuyuy!
Un ultraje ultramundano
¡Uyuyyuyuy!
Uñada umbilical, undante, umbrosa...
¡Uyuyyuyuy!

Urge ultimar utilidades, urge ufana unicidad
Urge unión uniforme, unión universal

Un unico ultimatum : unánime utopía
Ubérrima utopía ubicada, utilizada...

... ¡Uf!

HE PERDIDO

A veces pierdo la esperanza. Y no sólo eso, porque me da por empezar a perder y ya me pongo a perder de todo. Desde que nací, he perdido un montón de cosas y es increíble las muchísimas que aún puedo perder. Desque que nací, he perdido dientes de leche, inocencia, confianza. He perdido pelo, ropa y un boli de los cuatricolores. He perdido la cartera, el DNI, la bici. He perdido la paciencia, a veces he perdido la sonrisa. He perdido el bolso, la cabeza, el norte y hasta el sur. También perdí una brújula. He perdido la virginidad, el entusiasmo. He perdido agilidad, y pereza. He perdido los nervios. He perdido abrazos y una agenda de la expo de sevilla. He perdido el tiempo, el olfato y el gusto. He perdido unos zapatos y una vez, unas bragas. He perdido el talón de aquiles, pero me dejé el otro. He perdido la verguenza y la diéresis. He perdido los papeles, los estribos, la cabeza, la razón y el culo. He perdido dinero, oxígeno y sabiduría. He perdido años y minutos, y segundos...pero nunca perdí el reloj. He perdido pendientes, o lo que es lo mismo: he perdido cuestas. También colgantes y pulseras. He perdido tontería y desconfianza. He perdido paciencia. He perdido amigos, y familiares y momentos. He perdido recuerdos. He perdido romanticismo, y presión arterial. He perdido sístoles y recuerdo haber perdido alguna diástole. He perdido optimismo y equilibrio, generalmente al mismo tiempo. He perdido fuerza y calorías. He perdido grasa, y la línea, y el punto, y la raya. He perdido la hipótesis, y la lógica. He perdido sujetos y predicados, diptongos e hiatos, sumas y restas. He perdido bilis, y dulzura. Y con suerte perderé vista, y oido y salud, y densidad ósea. Quizás pierda memoria, y entusiasmo o quizás aún me quede por perder aburriemiento y pesar.

Lo que nunca nunca he perdido es miedo, inquietud y sentido del humor. Me da, que al final los tres, me han salvado de haber perdido...VIDA

SINTETIZADOR DE IDEAS

- Al final todo es nada pero durante, lo es todo.

- No es muy digno tener un accidente y que tengas las bragas rotas, pero más indigno es que eso sea lo importante.

- En el inconsciente está la clave de lo que llamamos vocación.

- Tengo una idea tras otra....No sé si la acabará pillando.

- Alguien no tiene por qué ser perfecto para ser justo lo que necesitas.

- No todo tiene que hacerse al pie de la letra, sobre todo porque ahí huele mal.

- Prohibido permitir que alguien te ''saque de quicio'' hasta saber qué es o dónde está ''quicio''

- Nada de lo que uno siente puede ni ha de catalogarse de tontería. Ni por otros ni mucho menos por uno mismo.

- Yo no soy la libertad, pero sí el que la provoca (Facundo Cabral)

- Inteligente es aquel que da igual con que CI técnico consigue felicidad práctica

- Un consejo: no me hagáis caso

- Nadie puede dar consejos, no hay hombre que sea tan viejo (Facundo Cabral)

- Estoy enamorada. ¿De quién? ¿Desde cuándo?... Eso ya después, cuando me enamore.

- Soy alérgica a la alergia. He tenido suerte, los hay que lo son a la alegría.

- Imagínate algo que te haría sonreir.... y ahora.... ¡hazlo!

- Cuanto más miro a la gente, más me veo. Cuanto más me miro, más veo a la gente.

- Si ya eres feliz y no lo sabes, no sólo eres estúpido si no que además eres muy

- El último giro que le di a mi vida, fue de 360º. Me quedé donde estaba y muy mareada.

- Estoy en rehabilitación. Soy una yonki del caos.

- Equivocarse cansa, pero sobre todo da miedo.

- Estoy agotada de tener miedo

OTRORA

¡Ojo!
Obstinadas obsesiones oscurecen, oprimen. Ofrecen obscena objeción
¡Ojo! Obstructivos odios ornamentan osados oasis.
Obstinadas opciones, omniscente opio oral.
Ohms oprimidos.
¡Ojo!¡Ojo!

Ocasionales oasis oídos, ordenados.
Obvios óbices observados, osados odios oídos.
Óptimas  objeciones obsequiadas, otros obstáculos oxigenados
Opresiones olvidadas...


Otrora,
ojo por ojo...

... otrora.
OLÉ!

EQUILIBRIO

El equilibrista de emociones. El funambulista más bien. Porque es él, ese que aparece cuando las emociones se sitúan de tal manera que sólo nos queda una fina cuerda por la que caminar. Hinchándonos de miedo a caer, de necesidad de entender cada apoyo. Le necesitamos. Él sabe lo que hace, sobre todo cuando debajo no hay red. Mantenerse sin perder la cabeza en la montaña rusa del riesgo del desamor y lo obsoleto del amor. Mantenerse ante el drama de desconfiar y la euforia de creerse confiado. No hay muchos funambulistas buenos. Lo importante es que el tuyo lo sea. El equilibrio no es fácil, sobre todo cuando todo cambia. No puedes creer en aquello de que ''todo va a ir bien'' porque lo único que sabes es que ''todo va a ir distinto'' y eso te deja en un vacío desconocido hasta el día que ese ''distinto'' se convierta en tu nuevo ''bien''.Cambia, todo cambia, todo el rato. El funambulista es importante, para mantenerse sí, pero sobre todo para avanzar...cuando el camino es una fina cuerda, en la que se te puede romper el ser.