viernes, 29 de abril de 2011

IDIOTAS

Venga ya, que estamos como putas cabras. Que hemos perdido el Norte, y si me apuras también el Sur, el Este y el Oeste. Que somos necios con patas. Narcisistas con pintas de humildes. Gilipollas que se pasan un día entero ante una boda real porque por lo visto, es la boda del siglo. Eso sí, de pronto ni Siria, ni Libia, ni Kenia, ni Costa de Marfil. Lo importante el puto beso en el balcón de la pareja. Porque claro, nadie quiere monarquía pero nos brilla el alma ante tanta diadema de diamantes y despliegue de descarado exceso. Y lo peor es que la novia iba ''sencilla''. Porque por lo visto, que el vestido no sea muy recargado, aunque valga veinte mil euros, significa que es sencillo. Y todo nos parece normal, porque es la realeza, ya sabeis, esos cabrones que viven de nuestros impuestos. Porque claro, es normal el exceso. Porque vivimos en el exceso. Porque lo normal es tener una habitación para leer, distinta del salón y la habitación para dormir. Distinta de la cocina y si me apuras del balcón. Porque lo normal es tener ocho vaqueros distintos, dos pantalones negros, cuatro vestidos elegantes, alguno de boda, veinte camisetas. Y lo normal es quejarnos porque pobres de nosotros tenemos que afrontar la terrible tarea de guardar la ropa de invierno y sacar la de verano. Somos estúpidos. Estamos imbéciles de exceso. Saturados de egocentrismo y autocompasión. Por que necesitamos todo, porque necesitamos más. Y porque encima creemos que nos lo merecemos ipso facto. Y cabrón aquel que intente hacernos ver que dos coches, tantos zapatos o tanto maquillaje en realidad, no son importantes. No son relevantes. Cabrón aquel que nos recuerde que con un par de zapatos uno ya está calzado. Sí, podemos tener la suerte de tener acceso a siete pares más, pero no podemos tener las narices de exigirlos, como necesidad básica del humano. Se nos debería de caer la cara de vergüenza. ¡Por favor! Deberíamos ser mucho más conscientes de la cantidad de cosas que son exceso y las consideramos normales. La comodidad es muy cómoda y la autocrítica no tanto. Demasiado mundo no puede vivir ni la mitad de bien que vivimos. Eso sí, como somos imbéciles, lloramos rodeados de abundancia. Ya sabeis, ''tampoco tengo tanta ropa, ni tantos zapatos'' '' no puedo salir a la calle sin maquillar''. Ególatras, ególatras de mierda. Lo que no se puede es salir sin comer, sin vestir, sin salud o sin respirar. No somos mas que imbéciles. Idiotas que se han acostumbrado al exceso y que ahora lo llaman normalidad. ¡Venga ya! Porque es para darnos con la humanidad en los morros. El Humano es sentimiento y no la cantidad de zapatos que tiene. Y si resulta que la sociedad es así, pues menuda puta mierda. Si algo no está bien, los suyo es tratar de cambiarlo. ¡y una mierda!, la sociedad la hemos hecho así, y lo que es peor, la seguimos haciendo así. Como no nos cambiemos un poco, vamos jodidos para cambiar el mundo. Aunque claro, igual es que no nos conviene. A ver si ayudar va a suponer quitarnos comodidad... mejor ni movernos, mejor ni pensar. Mejor decirnos ''tampoco es para tanto'' y pasar a otro lugar



martes, 26 de abril de 2011

CARTA CALMADA



Cada carta calmada concuerda con conceptos catastróficos caducos. Concuerda con el control del caos, con el control certero del cíclico caos.
Cuesta conseguirlo, cierto, pero conceptos cuestionados y certitudes cuestionadas culminan en claridad. Culminan con la cabeza en calma, con el cerebro en calma

Consiste en conceptos del corazón corregidos, conceptos con corazón comprendidos. Consiste en contestarte con cierta confianza. Contestarte, porque cuando callas caes, cuando chillas clamas y cuando contestas calmas.

Cada culpabilidad confesada, como calco cabrito del cerebro. Conceptos camaleónicos con convicción calificados como causa. Cabronadas cerebrales concluidas.

Querida calma certera: CGRACIAS



domingo, 24 de abril de 2011

AL VERRÉS

Será que me nos hemos puesto los ojos de sentir al revés...


Porque teniendo gente, nos sentimos solos
Porque estando solos, no pensamos más que en la gente
Porque estando de maravilla, recordamos lo fatal que podríamos estar
Porque estando fatal, tenemos más fuerza que nunca
Porque con fuerza, estamos más débiles que nunca
Porque con debilidad, nos sentimos cobardes
Porque al poder sentirnos cobardes,  somos valientes
Porque sabemos que podemos, y lo dudamos más que nunca
Porque temblamos la duda, desde la mayor de las tranquilidades
Porque estamos tan bien, que nos sentimos mal
Porque sonriendo, no podemos no llorar
Porque llorando no tenemos más que sonrisas
Porque echando de menos, dependemos un poco
Porque dependiendo un poco, nos sentimos más completos
Y porque estando más completos, resulta que estamos más solos




...será  que nos hemos puesto los ojos de sentir al revés.


jueves, 21 de abril de 2011

SINTETIZADOR DE IDEAS

- Sueño con endodociarme la emoción

- Hazte el amor o estarás en guerra

- El borrador es el asesino en serie del error

- Una sonrisa a veces oculta una lágrima

- ¿Sufrir y no decir nada? Eso sí que es estúpido

- Estar mientras te gritas por dentro es horrible. De hecho, es tan horrible, que es NO estar.

- Tengo miedo.... me vuelvo humana!

- Hay tanta emoción no resuelta, que a veces lo llamamos problema

- ¿Inmortal yo? A mí no me insultes

- Es difícil ser tan valiente como para sentirse cobarde

- Me aburre ser tan aburrida y además, me da pánico el aburrimiento

- O te sonries, o te sonrío

- Nota a la luz: supongo que estarás llegando, porque aquí no te veo

- Sé mucho de ortografía. Que es como decir que no sé nada de astronomía

- Tendría narices que todo fuera por nada

- Si quien tiene boca se equivoca, quien tiene cerebro se corrige

- Si ''no estoy de acuerdo'' significara ''estoy de acuerdo'' estaríamos en desacuerdo mucho más tranquilos

- Debería estar prohibido parar el cerebro en doble fila

- Los amigos lo son, porque están de acuerdo en lo que quieres ocultar y coinciden en lo que promueves para ello. Eso sí, menos mal que existen.



jueves, 14 de abril de 2011

MALENTENDIDO

Si hubiese sido capaz de trasladarle ese mecanismo, no habría sufrido tanto... o quizás sí, ¡quién sabe! El mecanismo se adquiría de una manera muy sencilla. Viviéndolo. Viviendo el calmarse. Pero quizás no fue así, o no fue suficiente. Quizás nunca se lo supo transmitir porque ni siquiera lo tenía. Ya daba igual, acababa de morir.

Sólo le quedaban unos minutos antes de tener que irse para siempre y no recordaba ni un solo momento feliz en su infancia. No había sido una niña feliz. Había sido una niña con todo menos felicidad. Porque la felicidad se labra en calma, en refuerzo, en pasiones, en convicción. La vida es muy caótica cuando es nueva y no está explicada. Y a ella, no se la habían explicado, no se la habían sentido. Ella se recordaba traicionada, en envidia, inquieta, insignificante, nerviosa, culpable, descontrolada, en desequilibrio, en soledad...no sabía definir la vida calmándose. No sabía sonreirse recordándose niña. Ella se recordaba loca. Nunca había sentido que era correcto que existiera.
Le daba pena, porque sólo ahora que dejaba de existir comprendía que la felicidad era estar convencido de existir. Sin culpas, sin sufrimiento y en calma. Por lo menos, la suya.

Pero eso ya daba igual. Los párpados del alma le pesaban toneladas. La paz llegaba en forma de fin. Si tan sólo se hubiera comprendido antes...habría vivido feliz su vida en vez de su muerte. No guardaba ningún tipo de rencor. Justo ahora comprendía que no había culpa, ni necesidad de ella.

Quizás nada había sido como lo recordaba aunque todo lo hubiera sentido como lo sintió. Menudo malentendido...


lunes, 11 de abril de 2011

ES ESENCIAL EXISTIR

En esta era estresada, estamos enterrando el existir, estamos eclipsando el ente, ejecutando efusiones. 
Esto es entristecedor, es exasperante. ¿Extraoficialmente? es ESTÚPIDO
Escondemos el ego en enfados efímeros estimándolos esenciales. Engreídos estamos. Engreídos en esencia. 
Eufóricos de estulticia. Estamos en espiritualidad estancada.

Ensombrecidas excusas encerradas en estrambóticos encefalogramas.
Eso es ,en efecto, escabullirse, es evadirse.  Estaría estupendo empantanar el entrampamiento, enmendando el extremo error de espantar el existir.

Empero, el edén emocional existe. Ese enteramente explicado.  Ese estable. Estaría en él eternamente. Entendiendo enteramente esta existencia etérea. Este estado es estupendo, existir epoto de euforia, ebrio en entusiasmo. Excelente eleccion el existir.
Es esencial encontrarlo o estaremos  en existencia estéril.

Es esencial existir, es esencia, es es encía, es esen, es, e..... ¿ein?




domingo, 10 de abril de 2011

BESOS VARIOS

Besos varios. Besos variables. Besos bárbaros. Bacanales de besos.
Besos que besan. Besos vascos. Besos bagos, vagos besos. Besos que valen. Vascos que besan.
Besar  por besar. Besar y variar. Bienintencionados besos. Besar y vivir. Benditos besos. Besos basados en bienes. Besos basados en verdad.
Besos que varían vidas. Vidas que varían besos. Besos benévolos. Bofetadas de besos. Besos vanos.
Besos vitales, brutales besos. Vibrantes besos, bribones besos.
Vasos de besos. Besos bonitos. Vencidos besos. Vision de besos.

¿Vienes y te beso? Vamos, besémonos.

Besos buenos, verdaderos besos. Vívidos besos.
Besos vencidos,  bufonescos besos. Vergonzosos besos.


Besos de esos? VIVOS Y VARIADOS BESOS SON


miércoles, 6 de abril de 2011

SINTETIZADOR DE IDEAS


-  Simple es  lo complicado tras ser pensado

- Nueva alergia mundial: intolerancia al sufrimiento.

- Me asusta asustarme

-Tendiendo el sentido, pretendemos que las cosas tengan sentido...seremos necios!

- La amenaza aterroriza antes de que el terror llegue

- Átate las emociones que te vas a tropezar

- Las conclusiones son aciertos temporales a la espera de más información que bien ratificará o bien redirigirá.

- Tenemos distintas reacciones porque tenemos distintos motivos, ¿cuales son los tuyos?

- Me temo yo que me temo

- No es que nos falte amor, es que nos falta entendernos ante él.

- El optimismo existe como impulso vital de supervivencia. El pesimismo como consecuencia de trampas emocionales.

- En el caos hay sentido.

- Si pensar es gratis, accesible, y puede sentar bien, no entiendo la fiebre por las rebajas.

- Yo también quiero un novio para vivir única y no morir sola

- Soy demasiado joven para sacar conclusiones de una vida larga, pero puedo pensar en las de una vida corta

- La lógica de nuestro consciente está plagado de publicidad engañosa.

- Atención Humanos: se nos ha ido de las manos el ser humano

- No todo puede ni ha de ser catalogado, clasificado, etiquetado y sentenciado como BUENO o como MALO. De hecho, hacer eso, es malo. No lo hagáis o no sereis buenos

-  No sufrir NO es no tener problemas

- Todo lo escrito es susceptible de no ser cierto en otras vidas. Bien porque así sea, bien porque aún no lo sepas.

- Negaría hasta mi capacidad de negar

- PAZ : Proyecto Ahogado Zumbante



martes, 5 de abril de 2011

RELATO Nº 653

Como cada domingo se despertó a las nueve de la mañana. Respiró hondo y se estiró tan largo como era en la cama para, acto seguido y de un sorprendente brinco situarse ante la puerta del baño.
Estaba muy ágil para la edad que tenía. En un par de semanas cumpliría setenta y tres años. El primer cumpleaños desde que perdió a su musa y con ella, a su fuente de inspiración. Hacía meses que ya no tenía ideas nuevas, ni sorprendentes. Hacía meses que en su cabeza las cosas, los recuerdos, sólo se destruían y no nacían. Y eso, no era nada bueno para un escritor.
Se miró al espejo y comprobó que los años dedicados a vivir estaban representados en arrugas de felicidad, en surcos de lágrimas tristes y en agujetas de plenitud. Sin embargo, desde que su  musa desapareció detestaba la imagen del hombre desaliñado e infeliz que le devolvía el espejo. No podía ser él. Se lavó la cara con agua fría, como cada domingo por la mañana, y bajó a desayunar. Té con limón y dos galletas de canela. Si se sentía especialmente hambriento, tomaría también una manzana. Como cada mañana. 
Siempre había sido un hombre metódico, inmensamente fiel a su propia monotonía. Supongo que la encontraba de algún modo terapéutica, aunque quizás sólo fuera un síntoma de escritor. caótico Seguía poniéndose los calcetines en el mismo orden que lo hacía cuando era pequeño, seguía sonriendo con pensar en la luna y Seguía abriendo las cartas de derecha a izquierda.
Sin embargo, esa mañana, sintió la monotonía más vacía que nunca. Era un escritor que ya no tenía nada de qué escribir. No tenía ideas. Ella había desaparecido y con su musa, su creatividad. Estaba perdido. Desayunando como siempre, desayunando lo de siempre y perdido como nunca.

En cualquier otro momento, en cualquier otro domingo, se habría puesto las zapatillas el chándal y su gorra, y habría ido a dar la vuelta al lago que sistemáticamente completaba en una hora y media. Habría comprado el pan y el periódico y se habría sentado en el porche con aquella vieja pipa de su viaje a Méjico. Habría mirado de soslayo a su musa y en unos pocos segundos se habría encontrado ante su vieja underwood de 1915 con una idea preciosa y un entusiasmo bárbaro. Y de ahí habría salido su relato número 653. Pleno, puro, espontáneo, caótico e inesperado. Todo lo que su monotonía no era.
Pero esa mañana no. Esa mañana lo caótico no era su relato. No existía relato. Y pensó que quizás su error había sido confiar siempre en la mirada de su musa.  Y pensó que debía de hacer algo, por primera vez, más allá de sentarse en el porche y esperar a que la inspiración estuviera al alcance. Se puso las botas de monte, el chándal viejo que usaba para ir a por setas y se fue a cazar. Se fue a cazar ideas. Y en ese mismo instante supo, que esa mañana, ya tenía un nuevo relato.