viernes, 7 de octubre de 2011

SUFRIR

Duelen de manera infinita las repeticiones. Ahoga fuertemente la desaparición de todo cambio. Amenaza el miedo con no permitir respirar. 
Porque uno piensa, de pronto vive, y de pronto muere. Porque uno sufre, sufre solo. Sufre de apatía, sufre de incomprensión. Sufre de 'más de lo mismo'. Sufre de tener que ser perfecto en aceptar imperfecciones. Sufre de que la demanda sea enorme y desde luego sufre de que la rabia también. Sufre de sufrir. Y uno puede saber que quizás no tenga por qué tanto sufrir Lo que no acepta es tener que nunca sufrir, porque esa situación es insufrible. Y uno se revela, y grita, y revienta...y en  definitiva sufre. Aunque le pidan que no lo haga, aunque le rueguen que resista y aparente. Aunque le insistan en tener que ser más fuerte. Aunque ni siquiera sepan que pidieron perfección cuando pedían comprensión. Nadie es perfecto. Pero ahí va un secreto
...yo tampoco


No hay comentarios:

Publicar un comentario